Hoy me dispongo a hablar de dos tipos de roles muy
diferenciados y contrarios entre sí aparentemente. Lo curioso de estos roles es
que no son desarrollados por nosotros activamente sino que dependen puramente
de la persona que nos mira, así que no existe ninguna regla conductual ni
ningún manual de estilo del rol. Todo depende del que nos mira y de diversos
factores que harán que nos sitúen en una u otra parte del continuo
polvo-hipoteca.
Porque, efectivamente, estos roles son dicotómicos al igual
que el cazador - recolector. Se nos sitúa en un punto del continuo en función
de cuán radical sea nuestra aproximación a uno u otro rol extremo. Y digo se
nos sitúa y no nos situamos porque repito que este rol depende del que nos
mira, aunque sí que es cierto que apuntamos cierta tendencia a que se nos vea
más o menos en un lado u otro de manera estable.
Cuando
vemos a alguien como "polvo" se da el efecto que cierta persona nos
genera una atracción sexual bastante poderosa pero sin embargo tenemos claro
que no es el prototipo de persona que nos gustaría que fuera nuestra pareja con
la que construir un futuro. Es decir, entra en el esquema de atracción sexual
pero no en el de pareja, con lo cual sería una persona con la que podríamos
tener buen sexo pero sin pasar a un plano emocional de entrada, ya que no lo
vemos como el/la chic@ de nuestros sueños.
En el
otro extremo tendríamos a la persona de "hipoteca". En esencia una
persona de hipoteca es la que en cuanto tenemos cierto contacto inicial, la
vemos rápidamente como un posible candidato a ser una perfecta pareja ya que
reúne aquellas cualidades que se valoran para establecer una relación a largo
plazo (de ahí el término hipoteca). Ojo! que la veamos así no significa que no
la valoremos para echar un polvo, simplemente nos llevamos una impresión de
ella que no solo consiste en atracción sexual, sino que podríamos ir a cenar,
tomar café y hacer alguna actividad más allá del sexo orientada a corroborar si
finalmente es una persona realmente hipotecaria.
En la foto mostraría, de manera simplificada, cómo me
imagino en mi cabeza lo que muchas
mujeres interpretan en la dicotomía polvo-hipoteca. En el polvo, el típico
macarrilla, malote y cabronzuelo con las mujeres que desprende un halo de macho
alfa por donde quiera que pisa, pero que aparentemente parece alguien con poca
capacidad de compromiso, empatía y sensibilidad y con un estilo de vida y moral
"relajados", por decirlo de alguna manera. En cambio el lado hipotecario me imagino a un
chico responsable, bien situado profesionalmente, atento y sensible, que
parezca dado al compromiso, fiel... etc.
Sé que es
simplificar mucho, pero estos roles se basan en impresiones primeras, es decir,
no se puede valorar cuando conoces a alguien largo tiempo o tienes diversos
contactos con la persona, simplemente hablamos de la primera o segunda (o
tercera) impresión al conocer a alguien. Es por esta razón que puedes acabar
con alguien que aparentemente te pareció de polvo o tener un CSE (Compañero
Sexual Esporádico) que inicialmente se percibió como hipotecario.
Otro
punto de análisis es cómo correlacionaría el IF con la percepción inicial de
polvo-hipoteca, que trataré en párrafos sucesivos.
Antes de
entrar en ese análisis, recordemos que el IF (Índice de Follabilidad) es el
nivel de deseo sexual que despertamos en las personas que nos rodean y que
puede ir del 0 (nivel de asexualidad absoluta rozando la repulsión) a 100 que
sería un deseo irremediable de tener sexo inmediato con esa persona. El IF
variaría en función de la circunstancia, así una misma persona puede generar un
IF diferente en función de diversas variables a las mismas personas. Por
ejemplo: ves a una chica vestida de determinada manera, arreglada y maquillada
de una forma determinada en un contexto X, por ejemplo, paseando por la calle o
comprando en un supermercado en una situación cotidiana cualquiera.
¿la ves de polvo o de hipoteca? |
Ahora
bien, situemos a la misma persona, igual vestimenta y maquillaje, pero la vamos
a situar en otro contexto, por ejemplo, detrás de la barra de una discoteca de
caché o en un restaurante fino como maître controlando camareros, control de
acceso y demás y con una actitud extrovertida. El IF variará y donde podíamos
valorarla en una situación cotidiana de un IF65, ahora aumenta hasta IF80. En
esencia esto es lo que pasa con determinados perfiles, camarer@s de sitios de
moda, bomber@s, policías. Creo que en muchos casos el aumento del IF está
relacionado con percibir a la persona como macho-hembra alfa. Así, poner a una
persona en un contexto de poder, de capacidad de manejar situaciones, de
carisma, etc aumentará automáticamente la percepción de ser un macho-hembra
alfa y su IF.
Un
ejemplo que clarificaría esta relación sería la situación típica en la que una
persona con un IF determinado vería aumentar su valor si está rodeado de
miembros del sexo opuesto. En este caso, el típico chico que sale una noche de
fiesta con un grupo formado solo por mujeres, no solo vería aumentar su IF
entre ellas, sino también entre mujeres de otros grupúsculos porque aumentaría
su percepción como macho-alfa.
Una vez aclarado el concepto IF, vuelvo a la idea que me he
dejado en el tintero párrafos atrás sobre la relación que se puede encontrar
entre éste y los conceptos de polvo-hipoteca. Normalmente, en la primera
impresión, una persona de polvo será valorada con un IF más elevado que una de
hipoteca, ya que precisamente la de polvo nos atrae única y exclusivamente por
una atracción de tipo sexual sin ir más allá. En cambio, las percibidas como
hipotecarias no nos despertarían tanta sexualidad de inicio pero nos
resultarían más interesantes de conocer más allá de sus atributos más carnales.
Es por esta razón que percibir a una persona como polvo siempre tendría un IF
mayor que si la percibiéramos como hipoteca.
Como podéis observar, todos somos percibidos como tal. En
próximos posts analizaremos, entro otros temas, lo que yo llamo el valor de
mercado y como éste se relaciona con los diversos roles que hemos descrito.
¿Hay algún nombre para aquel cazador o recolectora que intenta mostrarse de polvo y tener un IF elevado para realmente conseguir una relación hipotecaria? Creo que sería un buen tema a tratar.
ResponderEliminarCurtis! veo que dominas a la perfección el vocabulario de la morbolosofía! pues justamente estoy preparando un post sobre las personas que describes de manera perfecta en tu comentario. Yo les llamo l@s Demandantes de Cariño. En próximos posts verás que explican lo que perfectamente has apuntado.
ResponderEliminara mi me pasa y a un monton de feminas, "el morbo que atrae raramente es el morbo que enamora", ahora mismo me encuentro en situacion de ver que hay muchos hombres polvo pero ni uno hipoteca (que este libre claro, los buenos estan pillados)
ResponderEliminarbesosss
chloe... pues estás en una fase brutal. aprovéchala mujer!! es muy interesante también divertirte sin más... lo otro... si llega perfecto y si no llega esa hipoteca con patas, pues lo ideal es ser capaz de obtener la felicidad vía fuente endógena... ;)
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